Desperté entonces creyendo no estar viva, creyendo haber partido lejos de aquí, de esta existencia que solo me causa dolor, todo se había inundado de luz, todo era bello y glorioso , tan luminoso y sutil que mis ojos no alcanzaban a creerlo, era un paraiso de dorado resplandor , de hermosura inconmensurable, un regalo no merecido, un obsequio invaluable... me encontraba en donde las almas sin hogar moran , en donde las aves cantan sin cesar , en donde los campos paresen nunca marchitarse , en donde solo existe primavera y en donde el invierno se extingue al igual que las sombras, que las noches , que los fantasmas y el sufrimiento... al fin puedo correr, puedo volar, puedo rozar la hierva con mis dedos y alzar mis manos al cielo sin miedo a verlo caer , hay solo felicidad, paz ... si esto es estar inerte, sin vida quiero estarlo así siempre.
IMPERIA |
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